En Cartagena venden minutos en el celular más caro del mundo (Crónica ficticia pero factible)




El aparato, el más caro del mundo según el despacho noticioso, es un I Phone 4 Supreme Diamond Rose, que, como afirma su diseñador inglés, Stuart Hughes, cuesta ocho millones de dólares. El celular en cuestión fue comprado por un multimillonario que prefiere mantener el anonimato, no se sabe si por pudor ante su evidente extravagancia, o por temor a la codicia que pueda suscitar entre los amigos de lo ajeno.

El hecho es que el multimillonario de marras ha llegado a Cartagena de Indias con todo y su celular empedrado (porque tiene incrustados 500 diamantes que suman más de 100 kilates) en viaje de turismo sexual. Los magnates, generalmente excéntricos, tienen gustos ídem; de manera que pide a su proxeneta de confianza que le traiga una virgen de trece años. El encargo llega sin demora a la suite presidencial de su hotel de lujo ubicado dentro del “Corralito de piedra”, donde el sujeto satisface su ímpetu lascivo para dormirse luego. Pero su víctima inocente se encapricha con el juguete de lentejuelas tornasoladas que la bestia dormilona ha dejado “pagando” sobre la mesa de noche, de modo que la niña se lo embolsilla como propina adicional al salario infame del proxeneta. El multimillonario, “víctima” del hurto, no denuncia el caso por temor al escándalo mediático. Se traga en silencio su propia hiel.

Sin tener conciencia de su valor de cambio, la pequeña le obsequia el juguete de “bisutería” a su hermanito de 14 años que vende minutos a celular en el mercado de Bazurto. –“Mira, Eduaddito, te regalo ejte celulá. Tiene pepita`e colore, pero no ej de juguete. Funciona`e vedda vedda.”- le dice la niña con candor generoso. Los amigos del barrio, que trabajan en el negocio de comunicaciones al detal, le abren las bandas al juguete y le insertan la sim card de alquiler. El negrito, previsivo, le adosa una guaya de alambre que ata a su cinturón de cabuya para que no se lo vayan a robar. Y así el niño vende minutos a celular en Bazurto sin que sus clientes se lleguen a imaginar que las pepitas que ruedan por el suelo cada vez que se cae al piso el aparato, por el uso y el abuso, son diamantes de verdad. Los perros del mercado los huelen con desdén, las gallinas atadas a una columna de la galería se los tragan con indiferencia, para cagar luego con la misma indiferencia; y los muchachos de la calle patean con ganas los pocos kilates que le restan al I Phone Supreme Diamond Rose de ocho millones de dólares.

La crónica es ficticia e insustancial, si se quiere, pero los hechos que la componen son realidad: el celular diamantino, el multimillonario banal capaz de comprar un juguete ostentoso que vale lo que cuesta afiliar a cuarenta y ocho mil (si, cómo no, 48.000) niños cartageneros al sistema de salud en un año, la miseria en la periferia de la ciudad, la explotación y el abuso sexual infantil, el turismo sexual, los proxenetas, la desidia oficial, la indiferencia, la paradoja, la ironía, el absurdo.

La línea divisoria entre la crónica y la ficción es muy sutil. Con mis tijeras curiosas he recortado fragmentos de realidad para recomponerlos caprichosamente, y editar un cuadro tragicómico de los hechos. Ficticio, claro está, pero tristemente factible.

créditos foto: www.flickr.com

Comentarios

  1. Darío: Esto dijo Greg Mortenson (nominado para el premio Nobel de la paz): "Hasta donde sé, llevamos ya ciento catorce misiles de crucero Tomahawk lanzados en Afganistan. Ahora consideremos el coste de uno de esos misiles rematados en un sistema de orientación Raytheon, que creo es de unos ochocientos cuarenta mil dólares. Con ese dinero se podrían construir decenas de escuelas y proporcionar a miles de estudiantes, ahora y en generaciones venideras, el acceso a una educación equilibrada y no integrista ¿que otra estrategia creéis que puede garantizarnos mayor seguridad?
    "Tres tazas de té" David Oliver y Greg Mortenson
    Con cariño: tu tía Ku

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  2. Ya ves, cuánto vacío interior puede empujar a esos seres insustanciales que buscan satisfacción en un simple aparato, que se hace importante para ellos por el simple hecho de lo caro que es.

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  3. Maese Celso Román, veterinario y gran escritor, me envía la siguiente precisión, enriquecedora y deliciosa:

    "Darío:
    Excelente la crónica del celular, que da incluso para que Alejo y Maco hagan la película.
    Solamente aporto un detalle del orden veterinario: cuando las gallinas comen piedritas, las dejan en la molleja, que actúa como primer estómago musculoso que muele los granos con ayuda de las piedritas. Se dice que el famoso "Gallino" Vargas entraba a las minas de esmeraldas con gallinas a las cuales hacía tragar las pepitas de esmeraldas y las sacaba vivas de la mina con el pretexto de que no las había podido vender. Una vez estaba en su casa, las sacrificaba y extraía las gemas...".

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  4. Tía Ku, mientras la guerra sea el negocio más rentable del mundo, la doble moral de los actuales gobernantes no contribuirá mucho al cambio. Desde luego nos queda la esperanza de las futuras generaciones, ojalá más sensatas.

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  5. Que falsedad, El Gallino Vargas O Martin Vargas "mi abuelo" fue un importante Ganadero en el pais, nunca se dedico a el negocio de las esmeraldas. Por favor recuerde que los "se dice" le dañan la reputacion a cualquiera.
    Mario Vargas

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    Respuestas
    1. Vale su aclaración, que se publicó libremente, sin editar, así como el comentario del señor Román que usted desmiente con el derecho que le asiste. Gracias por su participación.

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  7. Esta muy bueno para facilitar la vida de los estudiantes como para cualquier persona felicidades.
    nosotros en alquiler de sim card facilitamos la comunicacion con muchas formas de pago.

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