Nada como el porro colombiano (a propósito de la inclusión del término vallenato por la academia de la Lengua)
Nada como el porro colombiano.... Eso comentaba yo hace unos meses en el “Salón Málaga” de Medellín mientras disfrutaba con unos amigos una cerveza helada al calor de ese aire musical colombiano que interpretaba, a la sazón, un versátil dúo de teclado y guitarra. Una turista española me interpeló para aclararme, muy convencida ella, que el porro californiano es mucho mejor. Ofendido por la ignorancia atrevida de la muchacha en cuanto a nuestro género musical, le insistí en que el porro (como la cumbia) sólo puede ser colombiano, si bien tiene grandes intérpretes en otros países latinoamericanos. Entonces la españolita se excusó diciéndome que ella se refería a otra cosa. Yo también me sentí avergonzado por mi defensa tan vehemente del porro equivocado, de modo que le ofrecí disculpas, aduciendo torpemente (peor la disculpa que la culpa) que yo de marihuana sé más bien poco. Pero revisemos el origen de esta confusión tan trivial: el error, creo yo, provino de mi ...